11/Hud-82: Y cuando vino Nuestra orden, la volvimos de arriba abajo e hicimos llover sobre ella piedras de arcilla a montones,
11/Hud-83: marcadas junto a tu Señor. Y no está lejos de los impíos.
11/Hud-84: Y a los madianitas su hermano Suayb. Dijo: «¡Pueblo! ¡Servid a Alá! No tenéis a ningún otro dios que a Él. ¡No defraudéis en la medida ni en el peso! Os veo en el bienestar, pero temo por vosotros el castigo de un día de alcance universal.
11/Hud-85: Y, ¡pueblo!, ¡dad la medida y el peso equitativos! ¡No defraudéis a los demás en sus bienes! ¡No obréis mal en la tierra corrompiendo!
11/Hud-86: Lo que Alá os deja es mejor para‚ vosotros, si es que sois creyentes. Y yo no soy vuestro custodio»
11/Hud-87: Dijeron: «¡Suayb! ¿Acaso te ordena tu religión que dejemos lo que nuestros padres servían o que dejemos de utilizar libremente nuestra hacienda? Tú eres, ciertamente, el benigno, el honrado».
11/Hud-88: Dijo: «¡Pueblo! ¿Qué os parece? Si yo me baso en una prueba clara venida de mi Señor y Él me provee de un bello sustento venido de Él... Yo no pretendo contrariaros cuando os prohíbo algo. No pretendo sino reformaros en la medida de mis posibles. Mi éxito no depende sino de Alá. En Él confío y a Él me vuelvo arrepentido.